“Absténganse de toda especie de mal.”
1 Tesalonicenses 5: 22
“¿Acaso no saben ustedes que, aunque todos corren en el estadio, solamente uno se lleva el premio? Corran, pues, de tal manera que lo obtengan. Todos los que luchan, se abstienen de todo. Ellos lo hacen para recibir una corona corruptible; pero nosotros, para recibir una corona incorruptible.” 1 Corintios 9: 25
“Los que quieran conservar sus facultades íntegras para el servicio a Dios deben observar estricta temperancia en el uso de sus bondades, así como una total abstinencia de toda complacencia perjudicial o degradante.” (p. 86)
“Deberíamos colocar la temperancia cristiana sobre una elevada plataforma. Debería ser un elemento vivo, fundamental, la reforma de los hábitos, la disposición y el carácter. La intemperancia está en el origen de todos los males de nuestro mundo.” (p. 140)